Hoy he tenido que dejar a la gata terrorista todo el día sola en casa. En principio no hay problema, ya la he dejado más veces sola y se dedica a dormir, así que no hay peligro. Pero hoy ha sido distinto. Ayer me asusté porque ya supera barreras arquitectónicas, es decir, ya se sube de un salto a la encimera de la cocina. Eso es peligroso porque suele haber comida y el único propósito de este bicho es comerse todo lo que le salga al paso; come hasta fruta y verdura, algo que yo no he visto nunca en un gato. Y como se sube a los sitios, también le ha dado por comerse el papel higiénico de la encimera del baño. Bueno, el problema de hoy ha sido que se ha quedado encerrada en la habitación sin que me diera cuenta. Yo pensaba que estaba en el baño, que es donde se suele quedar, con sus cosas; pero hoy se ha quedado encerrada. Lo más alucinante de todo es que ha estado más de 12 horas allí encerrada y ni siquiera se ha hecho pis... ¡minina buena!
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