Hoy, vía papito con fotos del abuelito, veo que mi sobrina está preciosa. Para tener sólo tres meses se conserva estupendamente, ¿no creéis?
Ahora estoy aquí pringada, currando un poco, ganándome el pan, y por culpa del proyecto no he podido ir a verla. Pero bueno, tengo todo marzo... ¡¡¡marzo va a ser el mes de los viajes!!! Espero que no me pase demasiada factura... jejejeje. Bueno, como ahora, sarna con gusto no pica.
Me da pena no poder estar con ella más a menudo, ver cómo crece más directamente que a través de las muy esporádicas fotos que cuelga mi hermano. Ya es toda una personita y me lo estoy perdiendo. Espero poder llevármela por ahí durante largas temporadas cuando sea un poco más mayor. No sé por qué, pero parece que ese derecho intrínseco sólo lo tienen los abuelos. Y no, no me digáis que si tengo tantas ganas de estar con mi sobrina, que tenga uno propio. Sabéis que no va a pasar. Además, no es lo mismo. Ni parecido. Con tu sobrina puedes ser la tía guay, la que la mima y la trae regalos a cada oportunidad que tiene. Cuando eres madre no puedes ser guay. ¡Ay! Lo siento mucho por todas esas madres que pensaban ser las mejores amigas de sus hijas. Lo siento, pero eso no puede pasar. Si eres madre tienes que ser responsable por ti y por tu hija. La responsabilidad anula la amistad en muchos sentidos, así que no puede ser. No es que sea malo... a ver, ser madre es un papel estupendo, pero no puedes serlo todo. No puedes ser todos los personajes de la obra. Lo siento.
Bueno, os copio-pego una de las fotos que ha puesto mi hermano en su blog, en la que se parece más a su madre, a ver si así no le sienta demasiado mal que haya dicho que nunca será una madre guay... Aquí la tenéis.
Ahora estoy aquí pringada, currando un poco, ganándome el pan, y por culpa del proyecto no he podido ir a verla. Pero bueno, tengo todo marzo... ¡¡¡marzo va a ser el mes de los viajes!!! Espero que no me pase demasiada factura... jejejeje. Bueno, como ahora, sarna con gusto no pica.
Me da pena no poder estar con ella más a menudo, ver cómo crece más directamente que a través de las muy esporádicas fotos que cuelga mi hermano. Ya es toda una personita y me lo estoy perdiendo. Espero poder llevármela por ahí durante largas temporadas cuando sea un poco más mayor. No sé por qué, pero parece que ese derecho intrínseco sólo lo tienen los abuelos. Y no, no me digáis que si tengo tantas ganas de estar con mi sobrina, que tenga uno propio. Sabéis que no va a pasar. Además, no es lo mismo. Ni parecido. Con tu sobrina puedes ser la tía guay, la que la mima y la trae regalos a cada oportunidad que tiene. Cuando eres madre no puedes ser guay. ¡Ay! Lo siento mucho por todas esas madres que pensaban ser las mejores amigas de sus hijas. Lo siento, pero eso no puede pasar. Si eres madre tienes que ser responsable por ti y por tu hija. La responsabilidad anula la amistad en muchos sentidos, así que no puede ser. No es que sea malo... a ver, ser madre es un papel estupendo, pero no puedes serlo todo. No puedes ser todos los personajes de la obra. Lo siento.
Bueno, os copio-pego una de las fotos que ha puesto mi hermano en su blog, en la que se parece más a su madre, a ver si así no le sienta demasiado mal que haya dicho que nunca será una madre guay... Aquí la tenéis.
2 lindezas:
Ay, qué cosita tan mona!
A ver si nos metemos mas a menudo en "papito" y dejas comentarios constructivos, en vez de ponerme a caldo diciendo que pongo "esporádicamente" fotos. Compatibiliza tu tiempo fuera de casa con el ordenata, no te faxtidia...
Hala, guapa, a cascarla... el próximo mes nos veremos, no?
SIN ACRITUD, QUE ES COÑA ;)
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